martes, 16 de diciembre de 2008

Tic-tac, tic-tac


Martes: luces, gente, lotería, taxis, semáforos, pelucas, ruido, frío, gorros, matasuegras, bufandas, mimos, castañas, policía, Tío Pepe, escaparates, besos, luces de colores, loteros, paseantes, trabajadores, emociones, calle Arenal, mendigos, Reloj, oro, sonrisas, calle Montera, El Corte Inglés, prisa, metro, adornos, vendedores ambulantes, oso, madroño, kiosko, calle Carretas, publicidad, músicos, manifestaciones, ambulancias, carteristas, regalos, termómetros, amantes, calle Mayor, bingo, cajeros, ilusión, café, estanco, donantes, obras, bolsas, amigos, añoranza, turistas, conocidos, razas, flashes, niños, papás noeles, globos, caretas, desorientados, risas, lágrimas, culturas, sonidos, Carrera de San Jerónimo, compañeros, sirenas, barrenderos, jóvenes, mayores, creyentes, ateos. Diciembre. Puerta del Sol

Tic-tac, tic-tac, tic-tac...
Gracias, Elena

lunes, 15 de diciembre de 2008

Agenda telefónica

Un cambio repentino de compañía telefónica me ha obligado a pasar toda mi agenda del móvil a papel. Era una de sas tareas que tenía pendiente desde hace tiempo, una de esas tareas de la que nos acordamos y lamentamos no haberla hecho antes hasta que perdemos a todos nuestros contactos...

Resulta curioso ver de una sentada cuántos nombres y teléfonos llenan tu agenda, ¡cuántas personas! ¿A cuántas de ellas has llamado alguna vez? ¿Cuántas te han pegado un toque? ¿Con cuántas realmente tienes contacto...?

A medida que iba copiando los nombres con sus números correspondientes, me di cuenta de que por cada uno de ellos iba esbozando una sonrisa, una sonrisa que reflejaba en mi cara recuerdos. E incluso en aquellos nombres en los que he tenido que parar a pensar con quién se correspondían, una sonrisa.

Creo que se puede afirmar que una agenda es, un poco, el mapa de nuestra vida y de las gentes que a han formado parte de ella.
Teléfonos que nunca has usado, teléfonos que quizá nunca usarás. Teléfonos que no borras por un 'Por si acaso...'

martes, 2 de diciembre de 2008

Balcones


Tengo una manía, digamos que es una manía curiosa, que no cotilla. Una manía creo que inculcada por mis Padres y reforzada por mí, junto con mis Hermanas. Una manía que es observar, observar todo, todo aquello que me rodea. No lo hago con ningún objetivo, aunque reflexionando un poco sobre ello, creo que se puede aprender mucho de lo que tenemos a nuestro alrededor. Creo que ese es el motivo por el que me lo inculcaron de pequeña, quizá sin saberlo, no sé, mis Padres.

Una de las cosas que más me gusta de esta manía curiosera es el hecho de levantar la cabeza en los lugares nuevos, para mí, a los que acudo. Me encanta mirar hacia arriba en cuanto piso una calle en la que nunca he estado, da igual que sea pueblo o ciudad, el caso es mirar hacia arriba y ver los edificios, las casas, sus ventanas, sus balcones... ¡Cuánto me llaman la atención los balcones!

Balcones abiertos, balcones cerrados, balcones cuidados, balcones abandonados, balcones antiguos, balcones modernos... ¡Me encantan los balcones!

Balcones con flores, balcones tendederos, balcones salones, balcones trasteros.

Para mí, los balcones son pequeñas habitaciones visibles para todos los que pasamos por debajo de las casas a las que pertenecen. Visibles para todos aquellos que nos atrevemos a mirar hacia arriba. Visibles para los que curioseamos más allá de la altura que alcanzan a ver nuestros ojos. Visibles para aquellos a los que nos gusta mirarlos, observarlos y admirarlos. Visibles para aquellos a los que nos gusta imaginarnos a la gente que vive en la parte no visible de la casa. Visibles para aquellos que pensamos que estas pequeñas habitaciones visibles cuentan muchas cosas de las personas a las que pertenecen. Visibles para los que nos gusta imaginar qué encerrarán tras sus ventanales de cristal.

Balcones al sol, balcones a la sombra

Foto: Viejo balcón